+ No es que esta entrada de año me haya sentado mal. Pero ya llevaba un tiempo dándole vueltas a algunas cosas, a algunas causas, a algunos porqués.
+ Tal vez la culpa no sea de Cobacho. Ni de Ballesta. No sé donde está la culpa, desde luego, aunque tampoco se trata de culpar a nadie.
+ Les pedimos que hagan una declaración de que la Universidad sea algo. Y les decimos, como no sea investigadora, no será. Frases lapidarias.
+ Y les decimos lo que les decimos, aún a sabiendas de que alrededor del 90% son sueldos a pagar todos los meses. Y con el 10% restante, es con lo que hacemos las orgías de investigación, de convergencia, de cultura y de esto y lo otro.
+ Luego, un día vemos que el presupuesto ( ya a estos niveles se les llama dotaciones, ejem) de las potentes y privadas Universidades Usamericanas nos multiplica, la que menos por 10 (Pittsburgh, PA) y la que más, por 200. En números redondos, dicho sea sin ánimo de molestar. El artículo que acompañaba al cuadro reproducido pueden leerlo aquí.
+ Y lo mismo, múltiplo arriba abajo, se puede decir de toda la panoplia de universidades españolas. Así que, apaguen la luz a ver si ahorramos un poquillo.
