+ La lectura, ayer, de una columna sobre la eterna disputa docencia-investigación me ha hecho recordar viejos escritos en desaparecidos blogs, preguntas enviadas por correo electrónico y respuestas en debates televisados de candidatos dispuestos a no urgar en las nóminas de sus votantes.
+ La Profa. Crespo, del área de Biología Vegetal y actual coordinadora general de la CNEAI, es de la opinión que hay que hacer bien las dos cosas, porque para eso se nos ha contratado. Lo sabemos claramente. En los perfiles de las oposiciones lo poníamos (¿nosotros?): docencia e investigación en ... ¡Y bien que está escrito!. Ambas son deber y derecho. Debemos enseñar e investigar. Tenemos el derecho de enseñar e investigar.
+ Y de gestionar, sólo si nos eligen...
+ Sin embargo, mientras que la investigación sigue un camino claramente establecido y premia (más bien poco, hay que aclarar) la suficiencia* investigadora, la evaluación de la docencia duerme plácidamente en los despachos y aulas universitarias, amparada en la dificultad titánica de tal tarea.
+ En la empresa privada, el cliente siempre tiene razón. En la pública, hemos salido a tomar café o tenemos reunión sindical o, en nuestro caso, de departamento. Y a la encuesta del alumno (nuestro cliente) la llamamos de satisfacción. Léanlo ahí arriba, je, je.
+ Menos mal que el programa electoral que vamos a ver implantado en los próximos meses incluía claramente la adopción de indicadores que nos permitan evaluar la calidad de la docencia impartida. Otra cosa es que eso se refleje en el complemento de méritos docentes que todo el profesorado de la UMU recibe. Escribiremos a la Profa. Crespo para darle cuenta de que sus ideas no son raras, en Murcia se va a ver el tema (diríamos).
+ Otra cosa, digna de un mayor análisis complutense, es que una semana antes, en la misma columna, el Rector de la Profa. Crespo, abogara por la defensa a ultranza de la docencia universitaria y especifique que se puede ser gran docente en dos versiones: sin sexenios y con ellos. Porque además, se publica en exceso. Este Rector lo achaca a un problema de ilusión. Si no la tienes... mal docente, seguro. Huelga (¿huy, esta palabra existe todavía en la universidad?) decir que esos dos tipos docentes tienen la misma consideración económica. El quinquenio docente, para todos.
* en ésto, la Profa. Crespo no se anda por las ramas: 5 cosas en 6 años, no es excelencia.
1 comentario:
"Menos mal que el programa electoral que vamos a ver implantado en los próximos meses incluía claramente la adopción de indicadores que nos permitan evaluar la calidad de la docencia impartida."
No sé si pecas de cobachista o de ingenuo. Prefiero pensar que lo dices de coña. No caminamos hacia progreso ni mejora, seguimos estando en el mismo sitio y seguimos soñando con que la playa está debajo de los adoquines.
Exijamos el cumplimiento de las promesas. Exijamos calidad, que estamos en el XXI.
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